sábado, 27 de enero de 2018

Que poco rato dura la vida eterna

Este adiós no maquilla un hasta luego
Este nunca no esconde un ojala
Estas cenizas no juegan con fuego
Este ciego no mira para atrás
Este notario firma lo que escribo
Esta letra no la protestaré
Ahórrate el acuse de recibo
Estas vísperas son las de después
A este ruido tan huérfano de padre
No voy a permitirle que taladre
Un corazón podrido de latir
Este pez ya no muere por tu boca
Este loco se va con otra loca
Estos ojos no lloran más por ti

martes, 2 de enero de 2018

Did you figure it out yet?

Hay algo a lo que refiero siempre, en lo que confío ante la verdad. Esas imágenes que se generan al cerrar los ojos. Confío más en el inconsciente que que en mi mente cuando esta despierta, porque cuando ella esta suelta puede inventar verdades. Sin embargo, el inconsciente nunca miente. 
Lo que alguna vez me hizo bien escapo de mis manos, por momentos me pregunto si fue lo adecuado. No lo sé. Hoy ya no creo que podría volver a hacerme bien. No se puede rebobinar el pasado.
Hubo momentos en mi vida en los que creía que sabía lo que quería. Descubrí que no se que es lo que me hace bien. 
Tan pocas cosas son certeras en la vida y ninguna parece cerrar un sentido. Mi futuro, mis ideas. Camaleones que mutan con cada luna.  
Lo que alguna vez se sintió a escapar hoy se siente a libertad. La manera de descubrir mi propia verdad. De encontrarme en algún rincón del mundo. 
Siempre hice preguntas que no tenían respuestas. Hoy me siento un poco más lista para enfrentar la oscuridad. Las incertidumbres parecerían menos peligrosas... y quizás solo se trata de abrirles la puerta primero. 
Pelee por recibir la verdad cuando yo misma no me la daba. 
No se quién soy ni que merezco, pero quizás puede encaminarme para tener respuestas. Respuestas que quizás siga esperando por el resto de mi vida sin ser escuchadas jamás. 
Creía ser dueña de la solución. Hoy debo enfrentar cosas que quise esconderme a mi misma.
La falta de amor. La perdida del cariño. La verdad. Simplemente son difíciles de ver... sobre todo de aceptar.

Creemos tenerlo todo en la palma de nuestra mano. Y estamos tan equivocados. Estuve tan equivocada. 
No me arrepiento de mucho. Sí me arrepiento de no haberme escuchado. Lo sabía. Siempre lo supe. 

No se puede ver el futuro. Pero se lo puede ver venir. 
Pero ante todo: Se lo puede cambiar.