jueves, 12 de abril de 2012

Tantas palabras refugiadas en tanto silencio.

Cerró los ojos. Todos a su alrededor reían de ella.
Se lo habían advertido. Ella simplemente no quiso verlo, aunque lo sabía. Sabía que iba a pasar.
Que ingenua había sido. Ella que creía que por fin le había tocado a ella. Que por fin sería su momento de brillar.
Fue ella misma y solo había obtenido eso de recompensa. ¿De qué servía? Ahora solo quería correr. Escapar.
Se preguntó quién notaría su ausencia. No serían muchos, de eso estaba segura. La familia, seguramente. Pero la familia no contaba, no para lo que ella tenía en mente.
Las risas se apagaron, ahora había silencio en la habitación y se atrevió a abrir los ojos. No había nadie, la sala estaba  vacía. Parpadeó, y la luz se desvaneció.
Esta era su momento, pensó. Era el momento justo para irse, para escapar. Nadie lo notaría. Aunque, pensándolo bien, nadie lo notaría aunque se escapara a la luz del día.
No importaba, no importaba si alguien la veía, tenía que irse. Debía hacerlo.
Corrió, corrió lo más rápido que pudo por esa ancha avenida por la que ya no transitaban autos.
Los recuerdos se arremolinaron en su mente. Que tonta había sido, se odiaba por ser así.
Odiaba, odiaba esa situación. Debía terminarla de alguna manera.
Miro hacia abajo. Las olas golpeaban las rocas. Había solo dos opciones. Cambiar las cosas, o terminarlas de una maldita vez.
Sintió una mano en su hombro. Él. Lo sabía, podía saberlo sin siquiera mirarlo. No volteó, y en cambio, avanzó un paso más. La abrazó y le susurro palabras que se perdieron en el rugido del mar. Una lágrima rodó por su mejilla y se odio por llorar. Tenía que terminar eso.
“Hay otra manera” lo escuchó decir, y ella solo pudo reír con sarcasmo. ¿Qué sabía él? ¿Qué sabía él sobre sentirse de esa manera? Volteó a mirarlo y pudo ver una súplica en sus ojos. No era sincera, de seguro. Todo era mentira. Todo volvería a ir mal, aunque intentara cambiar las cosas.
Le dio un corto beso en los labios y le sonrió. “Lo sé”, le dijo, y entonces saltó al mar, a encontrarse a sí misma en algún lugar. 

2 comentarios:

  1. Este me encantó, podría aconsejarte, pegarte o simplemente contradecir varios items, pero tuyo o no; el arte es arte, sos una romántica (aclaro no cursi, del romanticismo) te amo <3

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  2. si sigo así, de este tipo de cosas va a ver muchas... yeah, i know, soy una romantica del romanticismo, del cursi ya todos sabiamos q no, jaja. te amo mucho mas totitola ♥

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